Pólizas de suma adecuada: un tema que quita el sueño a los PAS
Los PAS tenemos la responsabilidad de asesorar a nuestros clientes para que no sólo tengan cobertura de seguros, sino que su cobertura sea suficiente. En esta nota, ALUMNI propone debatir las variables a considerar para asegurar a nuestros clientes con una suma adecuada y qué cambios necesitaría implementar el mercado asegurador para acompañar.Un tema que, como sabemos, a los PAS nos quita el sueño.
Tener un seguro debería darnos el respaldo suficiente. Sin embargo, si observamos por ejemplo las pólizas de incendio vigentes en Argentina, el 93,60% está en infraseguro, cubriendo un promedio del 52% del valor real de aquello que aseguran (El Seguro En Acción, 2023). Y así se repite en todos los rubros.
Consultamos a Rodrigo Oddo, Productor Asesor de Seguros en la ciudad de Santa Fe desde hace 12 años, miembro de ALUMNI. “En ALUMNI llevamos adelante el debate sobre cómo fomentar más conciencia y cultura aseguradora, no solo para nuestros clientes sino para el mercado en general. Buscamos ayudarlos a detectar riesgos no percibidos e instrumentar respuestas adecuadas a través de pólizas adaptadas a sus necesidades.”
La palabra suficiente cambia toda la ecuación respecto al respaldo y tranquilidad que debería darle, a todas las partes, la póliza de seguro.“Sin hacer grandes estudios de mercado y sin importar de qué ramo estemos hablando, la información de la cual valernos para llevar tranquilidad a nuestros clientes es, cuanto menos, insuficiente.”, comenta Oddo, quien recibió una mención especial por su tesis final del Programa Analista de Riesgos del CAES.
Responsabilidad civil: la pregunta que nadie quiere hacerse
En el caso de una póliza de responsabilidad civil o de accidentes personales para un contratista o trabajador informal, ¿Qué constituye una suma asegurada adecuada? Como PAS sabemos que esta es la pregunta del millón.
“Tal vez la respuesta más simple sea que el cliente debería contratar un seguro con límites de protección tan altos como la compañía pueda permitirse, o bien que estos sean tan altos como lo que esté dispuesto a afrontar en concepto de pago de la prima. Pero sabemos que en la práctica la respuesta es mucho más compleja”, debate Rodrigo.
El tema es que no estaríamos poniendo al cliente en el centro al no preguntarnos si esa suma máxima es la suficiente para reponerse de un daño y, además, no nos estaríamos ocupando del riesgo, como la premisa más importante que nos dispara qué cobertura de seguro se requiere para transferirlo.
Con los seguros de propiedad, la pregunta del millón se repite. ¿Qué constituye una suma asegurada suficiente, por ejemplo, para una cobertura de robo, de daño a bienes o en los casos más cuantiosos, de incendio en un hogar, un comercio o una industria?
Inclusive la casuística nos dice que muchas veces el daño consecuencial supera los producidos originalmente por un incendio.
Aportes para la construcción de pólizas suficientes
Es sabido que las compañías aseguradoras disponen de información actualizada de los valores de reclamos, recurso bastante utilizado por los PAS. Las empresas saben cuánto se está indemnizando dentro de la cobertura de ART, por siniestros viales de consideración o por hechos de responsabilidad civil.
En caso de bienes patrimoniales, podemos ayudarnos con índices públicos, como son los costos de construcción vigentes para cada región del país.
Pero no es aconsejable quedarnos sólo con esto. “Cada caso es único y no podemos hacer un ‘copiar/pegar’ de estos datos. En ALUMNI advertimos este ‘vicio de mercado’ y lo consideramos un gran error. ”, explica Rodrigo Oddo.
Podemos también consultar calculadores disponibles en línea e información de portales web. Estos nos ayudan a tomar una noción realista de costos de una vivienda, local o una nave industrial. También existen calculadores de indemnización por invalidez o muerte.
Pero no es solo obtener el dato numérico para diseñar una buena cobertura. Hay casos que nos demandan ir más allá: por ejemplo extrapolar un riesgo a situaciones en las que se pueda ver afectada la vida de muchas personas o considerar el tiempo transcurrido entre el siniestro y la indemnización, sobre todo en tiempos de volatilidad económica.
Una variable clave es la conversación sincera y constante del PAS con su cliente. Una comunicación asertiva, profunda y periódica con los asegurados permite diseñar y mantener una cobertura que garantice valores de reposición precisos.
El diálogo con cada cliente es una premisa clave para ALUMNI: “estamos convencidos de que los PAS tenemos que invertir más tiempo en hacer mejores preguntas para diseñar mejores respuestas” argumenta Oddo.
Una variable local: la economía Argentina
La imprevisibilidad de la economía argentina demanda tomar medidas adicionales para el diseño de pólizas más eficientes y personalizadas. Entre ellas, constituirlas en dólares y automatizar el control periódico de las sumas aseguradas vigentes.
Es necesario tener un protocolo de actualización de sumas aseguradas en caso de devaluación de la moneda para corregir rápidamente su licuación. También considerar aplicar ajustes en el diseño original de la póliza que puedan representar un sobreseguro en el presente inmediato, pero que respalden al cliente ante siniestros que se terminarán indemnizando en el mediano o largo plazo (bien llamados, “siniestros de cola larga”).
Es fundamental Informar al cliente y hacerlo partícipe de estos gatillos de actualización, invitándolo a dar aviso cuando cambie o compre algún bien o cada cierta cantidad de tiempo para revisar la sincronización de sus activos con los declarados en sus pólizas.
Propuestas para el mercado asegurador
Una de las premisas de ALUMNI es constituirse como un think tank que abra debates sobre qué cambios culturales y de mercado deberían impulsarse para transitar hacia sociedades más resilientes.
La «Encuesta de Infraseguro 2022/23» (LEA) concluye que los edificios se encuentran asegurados, en promedio, al 60,01% de su valor de reconstrucción a nuevo. Este estudio también señala que el infraseguro es menor en asegurados con superficies cubiertas superiores a 10.000 m² (promedio de 33,5%) y mayor para aquellos con superficies entre 3.000 y 10.000 m² (43,71%).
La evidencia es clara: el mercado debe abordar seriamente el problema del infraseguro. Ignorarlo es en el mejor de los casos, ingenuo y en el peor, una mala práctica profesional y moral.
Sin una cobertura adecuada, las pérdidas pueden provocar fácilmente la ruina de una familia o el fracaso de una empresa, donde por detrás siempre hay una (o muchas) familias.
De los debates de ALUMNI surgen cuestiones como la necesidad ineludible de que las compañías compartan periódicamente los datos numéricos y a su vez brinden herramientas para trabajar las pólizas vigentes con esos datos.
Tomar experiencias de otros países y adaptarlas localmente es otra variable. En España existe la “cláusula de revalorización automática» o «cláusula de actualización de capitales”. También la «regularización del capital asegurado post-siniestro», que permite detectar infraseguro durante la liquidación de un siniestro y ofrecer la opción de emitir un endoso complementario para cubrir la diferencia entre el valor asegurado y el valor real del bien.
“En ALUMNI, los egresados y egresadas del Programa de Analista de Riesgos del CAES buscamos contribuir a agregar y mejorar el mercado asegurador. Nuestra preocupación es pensar en la cuenta final. Tanto para ayudar al PAS a asesorar mejor como para cuidar al actor principal del sistema, que es el asegurado.” cierra Rodrigo.«