Los controles realizados por la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) durante el fin de semana largo, determinaron la retención de 77 vehículos de cargas y pasajeros. Los incumplimientos fueron por deficiencias técnicas y por falta de documentación obligatoria de los conductores y los servicios. Este fin de semana continúan las fiscalizaciones por el Operativo Verano 2020 a cargo del Ministerio de Transporte.
Los operativos se desplegaron por todo el territorio nacional a través de las delegaciones de la CNRT y, además, se reforzaron lugares puntuales donde se esperaba una gran afluencia vehicular, como Lincoln por los carnavales y Baradero por el festival de Rock. Todos los operativos se desplegaron junto a Gendarmería Nacional y policía local.
De los resultados se desprende que se controlaron 12.482 conductores y 12.281 vehículos de cargas y pasajeros, de los cuales 1018 fueron infraccionados y 77 fueron retenidos. A su vez, 6 eran ilegales y no contaban con ningún tipo de habilitación.
Al igual que el resto del año, en los controles se le realiza el test de alcoholemia a los choferes, y se fiscaliza su licencia profesional y el descanso obligatorio. Se verifica también: que los vehículos cuenten con la documentación (habilitación y seguro) y con los elementos de seguridad obligatorios en regla (matafuegos, escotillas de emergencia, puertas, entre otros); la calidad de los vehículos y el tacógrafo de velocidad que mide la circulación permitida. Además, mediante las unidades de Control Psicofísico (UCP) se le realizan controles de salud a los conductores antes de tomar el servicio tanto a conductores de transporte de pasajeros como a choferes de cargas.
Las Unidades de Control Psicofísico (UCP) determinaron que, en lo que va del operativo desde el 20 de diciembre, hubo 3.603 choferes controlados y 107 tuvieron una retención de su licencia. Estas unidades realizan estudios psicofísicos a los conductores antes de que tome el servicio, para establecer que se encuentran dentro de los parámetros requeridos para llevar adelante su tarea.
En cuanto a los test de alcoholemia se realizaron 2.338 en UCP de los cuales no hubo resultados positivos. Por otra parte, se registraron 506 controles sustancias y se detectaron 2 casos positivos. Ambos conductores quedaron desafectados y se les inhabilitó la licencia, en términos de la resolución CNRT 1028/17. El plazo de suspensión de la licencia habilitante es de 90 días para aquellos conductores de colectivos, micros y camiones que se les detecte alcohol o sustancias en sangre, en tanto que las empresas deberán afrontar multas de hasta 30.000 boletos mínimos.