
Por
Nicolás Saurit Roman,
presidente de AAPAS
El reciente incendio ocurrido en el polígono industrial de Ezeiza dejó importantes daños materiales y un fuerte impacto social y económico en la comunidad.
Este hecho vuelve a mostrarnos algo que en nuestra actividad es fundamental: la producción convive con riesgos operativos complejos, y su adecuada gestión exige tanto prevención como coberturas correctamente diseñadas.
Frente a acontecimientos de esta magnitud, lo primero que debe analizarse son las fallas en la prevención. El seguro es un pilar esencial, pero ninguna póliza reemplaza una buena gestión preventiva, retomando la conocida frase: “más vale prevenir que curar”.
Una vez producido el siniestro, emergen dos conceptos centrales:
- El seguro como instrumento reparador, capaz de recomponer patrimonios y brindar segundas oportunidades.
- El valor esencial del Productor Asesor de Seguros matriculado y especializado, quien diseña, dimensiona y acompaña coberturas que verdaderamente responden.
Cuando el seguro está bien confeccionado, cumple su rol. Sin embargo, existen escenarios —como los vinculados a la responsabilidad civil de gran magnitud— donde el daño puede ser tan extenso que la suma asegurada es difícil de determinar y es de compleja colocación.
Por otro lado, como vimos recientemente en la inundación de Bahía Blanca, la presencia del seguro en los hogares afectados fue muy baja, lo que evidencia un problema distinto pero igual de relevante: la escasa penetración de los seguros no obligatorios en amplios sectores de la población.
El rol de AAPAS
Desde AAPAS reiteramos la importancia de contar con seguros técnicamente adecuados, elaborados y acompañados por un PAS profesional, capacitado para evaluar riesgos, dimensionar coberturas, identificar brechas y brindar asesoramiento permanente a empresas y particulares.
Asimismo, reafirmamos nuestro compromiso institucional con la formación continua.
A través de nuestros espacios de capacitación — en especial del Programa Ejecutivo en Seguros— trabajamos para que cada productor cuente con herramientas sólidas para afrontar los desafíos actuales del mercado. Esto incluye la capacidad de diseñar pólizas específicas para riesgos operativos, que protejan la continuidad de los negocios y la estabilidad de trabajadores y comunidades.
El camino es claro.
Más profesionalización.
Más prevención.
Más asesoramiento especializado.
Ese es el compromiso de AAPAS con la sociedad, con las empresas y con toda la actividad aseguradora.«


